Ya hace algún tiempo
que me rondaba por la cabeza hablar de esta película protagonizada por Cameron
Díaz, Christina Applegate y Selma Blair. Tal vez no se trate de una obra maestra,
es más, el argumento gira en torno a las aventuras (y desventuras) de Christina, Courtney y Jane, tres chicas independientes
y con éxito en sus carreras y que quieren “jugar” y disfrutar de los hombres.
En una de sus noches de fiestas, Christina conoce a su príncipe azul, Peter, pero
desaparece rápidamente y ella se queda sin saber nada de él, salvo que su
hermano contraerá matrimonio en un pequeño pueblo. Junto a Courtney, se lanzará
a buscarlo. Su otra amiga Jane, se quedará en casa con su nuevo novio. En el
viaje, las dos amigas vivirán diversos obstáculos como estropicios de ropa,
encuentros no deseados en servicios públicos, tiendas de ropa pasada de moda pero
finalmente, al llegar a la iglesia, para sorpresa de Christina se descubre que
su príncipe azul es en realidad el novio de la boda. A partir de ahí,
las tres amigas descubren que ya están cansadas de jugar y quieren más.
La
sinopsis parece que no ofrece nada novedoso y revelador, pero no nos dejemos
llevar por las sinopsis, que no proporcionan ni la mitad de la información. Si el
humor masculino cuenta con títulos como American
Pie o Road Trip, el equivalente
femenino de ese género, sin duda, sería La
Cosa Más Dulce (también conocida como The
Sweetest Thing), la diferencia es que las primeras que he nombrado han sido
más aclamadas y puede que los hombres tengan mucho más sentido del humor a la
hora de digerir este tipo de películas.
El
humor descarado de La Cosa Más Dulce
ofrece escenas y tramas dignas de mención, con un cachondeo muy bien llevado.
Sin duda, mi escena favorita es la del sueño de Christina, en el que un entregado
Peter la agasaja a sexo oral mientras ella se zampa helados de 0% calorías, además
Peter, entre otras informaciones de interés, le revela que a los hombres no les
gusta que a ellos se les realice sexo oral, que eso es un bulo que no sabe de
dónde salió pero con el que hay que acabar cuanto antes. Interesante sueño.
Otra
secuencia bastante conocida y la más memorable de la cinta es la del número
musical en un restaurante por parte de las tres protagonistas. La letra del
número musical es acerca de cómo las mujeres alaban el tamaño de los genitales
de los hombres: "...No puede caber
aquí. Mi cuerpo es una película y la estrella es tu pene!..." Este
número musical, conocido como "No Puedes Caber Aquí" o "La
canción del pene", fue retirada de los cines de Estados Unidos (se puede
tener armas en casa, pero hablar de penes está prohibido), aunque permaneció en
las versiones para salas de otros países, ¡Menos
mal! Aquí dejo el enlace para ver esa secuencia tan divertida para muchos y tan vergonzosa para otros pocos... https://www.youtube.com/watch?v=ER3PZw86NE4
Y
cómo no olvidar el momento en el que Christina y Courtney regresan de la boda
de Peter, cuando se encuentran su casa atestada de vecinos, policía, bomberos…
Ellas entran corriendo pensando que a Jane le haya ocurrido algo horrible y se
encuentran con que la pobre chica se ha quedado enganchada al piercing del pene de su novio mientras
ésta le hacía una felación.
A pesar de la problemática situación, Christina y
Courtney, junto con la ayuda de todos los vecinos y policías que se encuentran
en la habitación, animan a Jane a relajar la “campanilla” cantando I don´t want miss a thing del grupo Aerosmith y de ese modo Jane consigue
desengancharse de su novio entre vítores y aplausos.
Y
desde luego hay muchísimas más escenas con las que una se partiría la raja a
gusto, sobre todo porque se trata de un humor femenino a lo bestia, no la
típica comedia romántica con un par de secuencias de risa y el resto todo
ñoñerías.
Quizás esta peli no se merezca un Oscar, pero sí un reconocimiento
aunque sea a nivel informal, ¡las mujeres necesitamos más películas de éstas!
Yo me río muchísimo con las cochinadas y las locuras de Stifler en American Pie, pero me siento mucho más
identificada con las ocurrencias y tonterías de Christina y sus amigas. Además, aquí no solo se habla de humor y cachondeo, la trama de la cinta también esconde el tema de las dificultades que tenemos muchas mujeres jóvenes para pasar la transición de los 30, o resumiéndolo mejor, la costosa decisión de dejar de ser alocadas y despreocupadas para comenzar a tomar decisiones más adultas.
Por
eso aquí dejo mi recomendación, quien no la haya visto le animo a hacerlo y si
se puede hacer en una reunión de amigas en plan fiesta de pijamas ya sería la hostia (hablando mal)!!!
Y para quién ya conozca esta película, le invito a que comente la escena con la
que más se haya reído y divertido.